Buenos días amados hermanos, gracia, misericordia y paz de DIOS nuestro Padre y de Jesucristo nuestro Señor y Salvador.
El versículo de hoy es:
Proverbios 31:27 Considera los caminos de su casa, Y no come el pan de balde.
un pasaje que exalta el carácter, la diligencia y la sabiduría de una mujer temerosa de DIOS; analicemos este versículo en profundidad desde diferentes perspectivas.
Considera los caminos de su casa
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En hebreo: Tsofeh jalijôt betâ (צֹפִיָּה הֲלִיכוֹת בֵּיתָהּ)
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«Tsofeh» (צֹפִיָּה) significa «vigila», «observa» o «supervisa». Es el verbo usado para los centinelas en la Biblia, lo que sugiere que esta mujer está atenta a todo lo que sucede en su hogar.
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«Jalijôt» (הֲלִיכוֹת) se traduce como «caminos», «conductas» o «actividades diarias», lo que implica que ella cuida la administración del hogar y el comportamiento de su familia.
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«Betâ» (בֵּיתָהּ) significa «su casa» o «su hogar», refiriéndose no solo a la estructura física sino también a su familia y responsabilidades.
Esta parte enfatiza que la mujer virtuosa está atenta a todo lo que sucede en su casa. No es pasiva, sino que vigila y administra con diligencia.
No come el pan de valde
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En hebreo: Velô tojel lejem atslût (וְלֶחֶם עַצְלוּת לֹא תֹאכֵל)
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«Lejem» (לֶחֶם) significa «pan», que en la Biblia representa sustento y provisión.
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«Atslût» (עַצְלוּת) significa «pereza» o «ociosidad».
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«Lô tojel» (לֹא תֹאכֵל) significa «no come», lo que implica que no se aprovecha del esfuerzo ajeno ni es negligente.
Esta segunda parte indica que la mujer virtuosa es trabajadora y no se deja llevar por la ociosidad.
Este versículo refleja valores fundamentales de la vida cristiana:
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La responsabilidad: La mujer virtuosa supervisa y cuida con sabiduría. Esto se alinea con el llamado bíblico a ser buenos administradores.
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La diligencia: No es perezosa ni se aprovecha del esfuerzo ajeno. Esto concuerda con Colosenses 3:23: «Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres. Conclusion:
Proverbios 31:27 nos muestra a una mujer que cuida diligentemente su hogar y trabaja arduamente para el bienestar de su familia. No es perezosa ni indiferente, sino que actúa con sabiduría y esfuerzo. Este versículo es un llamado para todos a vivir con responsabilidad y entrega, honrando a DIOS en cada área de nuestra vida.